Este 18 de febrero la Cámara Federal de Apelaciones condenó al ex médico militar Jorge Capellino a la pena de prisión perpetua, al encontrarlo culpable de los asesinatos de Carlos José María Fernández y Juan Alberto Beto Osuna, en el episodio conocido como “Masacre de la Tapera”.

De este modo, la Cámara revocó parcialmente un fallo de primera instancia, y concluyó que los crímenes “configuran delitos de lesa humanidad ocurridos en el contexto histórico del terrorismo de Estado que asoló a nuestro país, en el marco del segundo genocidio nacional perpetrado entre los años 1975 y 1983”. Reconocerlo, dice el tribunal, contribuye a admitir que el derecho penal también es “productor de verdad”, por lo tanto, “nominar como genocidio lo que se ha probado que ocurrió en Argentina es producir verdad”.

El ex médico del Hospital Militar de Paraná ya había sido condenado en 2018 por la privación ilegítima de la libertad de Gustavo Hennekens; y ahora también se reconoció su participación en la aplicación de tormentos, vejaciones y severidades del ex detenido político.

También había sido condenado por su participación en el homicidio calificado por alevosía de Pedro Miguel Sobko, quien permanece desaparecido desde el 2 de mayo de 1977.

Ésta es la primera condena por los hechos denominados “Masacre de la Tapera”, en calle Rondeau N° 1396 de Paraná, en el que en un fraguado enfrentamiento fueron asesinaron los militantes populares Juan Alberto OSUNA y Carlos José María FERNÀNDEZ, quienes habían sido secuestrados por fuerzas conjuntas del ejército en la provincia de Santa Fe.

Desde AGMER celebramos que los juicios de lesa humanidad sigan avanzando contra la impunidad, porque nuestra lucha por Memoria, Verdad y Justicia es tan inclaudicable como nuestro compromiso con la vigencia plena de los derechos humanos.

Mario Bernasconi
Sec. de Derechos Humanos
AGMER CDC