El juicio y condena a los responsables de los crímenes de la dictadura genocida es un logro histórico que distingue y honra a nuestro pueblo. El de Memoria, Verdad y Justicia es un camino de lucha que iniciamos de la mano de las heroicas Madres y Abuelas, desde el momento de las primeras búsquedas de familiares desaparecidos. Es un sendero grabado en lo más profundo, trazado a fuerza de denuncias, marchas y la gloriosa ronda de cada jueves. Cuando no hubo justicia, hubo escrache. Pero cada vez que el Estado tomó en sus manos el reclamo contra la impunidad estuvimos presentes aportando testimonios, señalando a los responsables y preguntando por nuestros 30 mil. Este es el camino que AGMER abrazó desde un primer momento y no consentimos ni permitimos ningún retroceso en esta marcha.

Hoy, la verdad histórica cuenta con el respaldo de los fallos judiciales, de los testimonios de las víctimas y familiares, de los descubrimientos de la antropología forense, del banco de datos genéticos y de los documentos históricos. Claramente, el negacionismo de los crímenes de lesa humanidad, la justificación mediante la teoría de los dos demonios, son mecanismos al servicio de la impunidad, la injusticia y la represión al pueblo que lucha. Y significan un atentado contra las conquistas populares de Juicio y castigo a los genocidas y sus cómplices.

Rechazamos y repudiamos el acto negacionista convocado por la legisladora Villarroel. Repudiamos que la legislatura de CABA haya decidido abrir sus instalaciones para manifestaciones de este tipo. Apoyamos y acompañamos a las convocatorias de organismos y organizaciones de derechos humanos, centrales y sindicatos en repudio a esta iniciativa.

Fue genocidio.  Son 30 mil ¡Nunca Más!

Claudio Puntel

Sec. de Derechos Humanos | AGMER CDC