Tras la realización en todo el país de la jornada de lucha, y en algunos casos, de paros convocados por la CTA y la CGT, para reclamar “varios puntos irresueltos como reivindicaciones”, el secretario de Jubilados de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), Roque Santana, advirtió a AIM que uno de los principales planteos es “la necesidad de derogar los topes salariales para el pago de las asignaciones familiares”.
En diálogo con esta Agencia, Santana indicó que uno de los reclamos por los que se realizó la medida es por “las asignaciones familiares”. “Pedimos que se liquiden sin topes salariales”, dijo y agregó: “el concepto de asignación familiar universal hace agua, cuando en los hechos no lo es, ya que el que percibe salario, o cierto salario; no las percibe en un total, y hasta hay situaciones en las cuales matemáticamente, el trabajador percibiría exactamente el mismo dinero trabajando o sin trabajar”.
Al respecto, señaló que “los trabajadores docentes, como tantos otros estamos demandando una urgente recomposición salarial, en Entre Ríos en particular en el mes de Julio, se debe liquidar el ínfimo porcentual del cinco por ciento, para sumar y dar una recomposición salarial anual del 19,7 por ciento, la más baja en los últimos cinco años, aumento declarado insuficiente por el congreso de Agmer y las Asambleas departamentales docentes”.
Entonces, el gremialista se preguntó: “después de julio más de 3000 docentes, bajaran las asignaciones familiares por hijo, dónde está el aumento salarial, si en algunos casos, se percibirá menos ingreso”. “¿Esto no es una baja del poder adquisitivo, para los trabajadores?”, cuestionó.
“Lo cierto que esta política salarial de los pisos-techos, es en los hechos una traba para lograr mantener como mínimo el poder adquisitivo”, dijo y explicó a AIM que “la política salarial, prevé generar una categoría salarial, de trabajadores pobres, la cual no se salga de una franja empobrecida, hasta con el logro de aumentos salariales”.
En este sentido, apuntó que “percibir un salario de 4001 pesos brutos (sin descuentos), no es de ninguna manera asegurar acceder a los bienes sociales, culturales, alimento, salud, educación con el constante encarecimiento del costo de vida”, y reiteró: “la asignación familiar, debe ser por la condición de hijo/a, o prenatal, de ninguna manera se la puede considerar, que se establece por la condición de asalariado de los padres” por lo que “exigimos la derogar los topes salariales para el pago de asignaciones familiares”.
Además precisó que “un docente que recién se inicia, con tres horas cátedras mensuales, percibe una remuneración cercana a 350 pesos, más el 30 por ciento porcentual de asignaciones por tres hijos, es decir, el 243 pesos, lo que da una suma total de 593. Si este trabajador de la educación no trabajaría, percibiría 810 pesos por tres asignaciones familiares. Entonces, ¿dónde está la justicia social?”, se preguntó.
Fuente: AIM Digital