Tanto el convenio colectivo nacional, que data del año 2008, como la escala salarial vigente son resultado de negociaciones paritarias y cuentan con la correspondiente homologación del Ministerio de Trabajo de la Nación. Tienen por lo tanto fuerza de ley, por lo que su incumplimiento es un flagrante atropello a los derechos de los trabajadores.

Asimismo, AGMER repudia categóricamente las misivas que la patronal está enviando a cada uno de los trabajadores adheridos al plan de lucha, en las que se los intima a abandonar la protesta bajo apercibimiento de ser despedidos. Esta actitud, con el claro objetivo de amedrentar a los trabajadores que reclaman por sus derechos, muestra que la empresa periodística no está buscando las vías de solución que corresponden.

Ante la gravedad de la situación, AGMER  considera necesario que las autoridades de los ministerios de Trabajo, tanto de la provincia como de la Nación, intervengan en el conflicto haciendo cumplir el convenio y escala salarial vigentes.