La propuesta es conmemorar el Día del Maestro, en vez de con un acto solemne estructurado, a través de una experiencia de aula taller. Docentes y alumnos serán partícipes activos a través de estrategias lúdicas, que abrirán una puerta hacia otros vínculos y modos de acercamiento.
Por Patricia Benítez
Congresal del departamento Concordia
¿Por qué cambiar el ritual de los actos escolares?
Según cita Juan Carlos Tedesco “los rituales que hoy conocemos nacieron estrechamente ligados al surgimiento de la escuela pública y la construcción del Estado – Nación…”.
La construcción del Estado-Nación requería que los ciudadanos tuvieran un nivel de adhesión tan profunda a los valores nacionales, que estuvieran dispuestos a morir por ellos. Para crear estos rituales de adhesión, los actos escolares se asemejan a los rituales religiosos: el maestro igual al sacerdote, los héroes a los santos y los símbolos debían provocar respeto sagrado; fueron rituales estrictos, pensados para crear una identidad nacional rígida y que excluían cualquier posibilidad de apropiación y creatividad por parte de la escuela.
Estos rituales se intensificaron durante la organización del sistema educativo a fines del siglo XIX y se continuó durante la dictadura militar (1976-1983) con la exacerbación del militarismo y autoritarismo de los rituales. Por ejemplo, podemos señalar que el desorden en la fila fuera leído como un gesto anti-patriótico; puede sonar exagerado, pero habría que alertar que aún se escuchan ecos de estas equivalencias en los discursos educativos.
El “moverse en orden” fue un valor escolar que tenía repercusiones en las formas de relación política que se quería inculcar.
Según Martha Amuchástegui en “Los actos escolares con banderas” (2002), esta herencia en la forma de pensar los rituales no es menor y cualquier forma de orden u organización de los cuerpos correría el riesgo de reinstalar un orden autoritario. Ese riesgo existe, pero vale la pena preguntarse si es posible rescatar algo de la ceremonia de la escuela para construir identidades colectivas, democráticas, que enseñen algo valioso sobre la nación, la comunidad y la humanidad. Muchas de esas bases tradicionales, de esa adhesión social, hoy están erosionadas.
Hoy podemos y debemos usar y crear rituales que movilicen sentimientos y que generen adhesión; algunos podrán ser renovados, otros conservados y ¡por fin!, otros están hoy en procesos de creación.
El aula-taller como sugerencia didáctica
La idea, en este caso, es hacer un taller para encontrarnos, revalorizar la plaza, recuperar la memoria y la necesidad de cobijarse, para encontrar reparo. La forma de ronda rompe el ritual de la fila. Los actos deben ocupar espacios públicos, plazas y calles; también nuevas formas de teatralizar el ritual que desjerarquiza lo tradicional, incorporando nuevos actores sociales (asambleas populares, asociaciones barriales, murgas, asociaciones gremiales, entre otros).
Que el niño sea partícipe interactuando con la historia en forma activa a través de estrategias lúdicas, desestructurando simultáneamente la solemnidad paralizante de los antiguos rituales, para abordar finalmente, en libertad, el desarrollo de su identidad, como integrante de una comunidad democrática, superadora y liberadora.
Queremos aportar algunas sugerencias didácticas pensando en la celebración del Día del Maestro. Como propuesta didáctica apuntaremos al aula taller. Esta propuesta, está basada en las ideas que elabora María Teresa González Cuberes en su obra “El taller de los talleres”. Allí, la autora nos acerca a un concepto claro sobre el mismo, considerando que Taller es como el tiempo-espacio para la vivencia, la reflexión y la conceptualización, como síntesis del pensar, el sentir y el hacer. “Aprovecho para contarles que es una propuesta didáctica antiquísima (Edad Media), era el espacio que se consideraba como “lugar de trabajo y aprendizaje». Esta técnica se ubica dentro de la Didáctica Constructivista, teoría que sostiene que el conocimiento se construye desde el sujeto, por lo tanto acentúa la mirada en lo que el niño hace y piensa, todo esto de la mano de la experimentación, la manipulación, de espacios de reflexión donde pueda preguntar y preguntarse, probar qué pasa si… y descubrir no sólo aquello que los adultos quieran que descubra; el rol del docente es sólo el de ser guía y facilitador de los grupos”.
El taller exige un grado de previsiones, aunque sus actividades demuestren libertad para hacer, nosotros como docentes debemos tener muy claro sus estructuras, que aseguren un normal desarrollo y evitar imprevistos que puedan comprometer la tarea. Saber que en él existen tres momentos:
1- pre-tarea,
2- realización o tarea
3- conclusión y posibilidad de nuevos proyectos.
A continuación, dejamos algunas propuestas que podrán ser graduadas según las posibilidades e intereses de los diversos grupos de alumnos:
PROPUESTAS
*Leer varias poesías referidas al día del maestro y de manera colectiva producir una.
*Buscar en diferentes libros historias de maestros; (Ej.: Rosario Vera Peñaloza, Olga Cosetini, Haydee Guy de Vigo, Angelita Peralta Pino, etc.).
*Armar afiches con las familias para difundir las historias en la escuela, recuerdos y anécdotas de docentes del establecimiento.
*Invitar al personal no docente de la escuela para que relaten cómo era la escuela cuando ellos iban, cómo eran sus maestras, los juegos preferidos, etc.
*Armar una galería con imágenes de maestras de distintas épocas.
*Pinturas de maestras realizada por los chicos donde se evidencien gestos (enojo, alegría, tristeza, etc.)
*Imágenes de maestras extraídas de revistas.
*Imágenes de maestras armadas a partir de collages con diferentes cuerpos.
*Entrevistar a una docente jubilada de la escuela.
*Armar la entrevista entre todos.
*Exponer la entrevista realizada en un diario mural.
Para enriquecer esta experiencia, se proponen diferentes juegos con ropas y elementos de bijouterie. Esto favorece la desinhibición, integración y expresión; compartir una jornada diferente y conocerse jugando es un modo de resignificar los vínculos.
Elegir un moderador o alumno guía.
Objetivos: fortalecer los vínculos interpersonales entre docentes-alumnos a través de actividades lúdicas-expresivas
Materiales: diarios, revistas, máquinas de foto, tijeras, plasticolas de colores, fibras, pegamento, pinturas de todo tipo (labios, delineadores, etc.), sombreros, carteras, morrales, camisa de hombre si hay varones, pantalones calzas, zapatos con tacos y sin tacos, aros, tatuajes al agua, vinchas de colores, pulseras, grabador, anteojos de colores, cartulinas , brillantinas, etc.
Propuesta: los chicos y el guía invitarán a los docentes a participar de esta actividad. Realizarán una ronda sentados en el suelo, y se les harán las siguientes preguntas:
_¿Cómo se vestían cuando salían a un cumple de 15 años?
_¿Cuáles eran los horarios de salida y los de llegada a la casa?
_¿Qué música estaba de moda?
_¿Qué nombre tenían los boliches o las reuniones de bailes en eso tiempos?
En una caja, que estará en el aula, encontrarán los elementos para vestirse: pelucas, sombreros, camisas, bijouterie, morrales, etc., lo que servirá para compartir y modificar, mientras dure el taller, el aspecto formal y la vestimenta diaria del docente
Como cierre el moderador invitará a que se realice un desfile de moda por la pasarela del recuerdo y luego, docentes y alumnos harán un abrazo simbólico alrededor de la escuela con todo el personal de la institución y los chicos. Entregarán flores de papel elaboradas por ellos /as con cartelitos y mensajes de deseos a cada docente, pintados y decorados con elementos originales del lugar (maderitas, hojas, papelitos de colores) etc.