La calle que bordea la Escuela Nº 100 de Puerto Nuevo y conecta con el barrio El Morro, Puerto Sánchez y el Thompson, se llama desde este lunes Claudio Fink, en homenaje al militante detenido-desparecido en Paraná el 12 de agosto de 1976. AGMER acompañó la actividad, a través de la Secretaría de Derechos Humanos de AGMER Central.
Abrazada al poste del cartel nomenclador, su madre, Clara Fink, leyó unas palabras que ella misma escribió para ponerle letra a la emoción del momento. “Desaparecidos. No olvidar es asegurar el futuro. Es preferible tener el alma dolorida de tanto buscar, que tenerla en paz por haber renunciado a la búsqueda”, remarcó Clarita, de 87 años, luego de que se descubrió el cartel indicador. Su hijo fue secuestrado durante la última dictadura cívico-militar de la casa familiar de calle Jujuy. Se sabe, por testimonios de la causa Área Paraná, que estuvo secuestrado en el centro clandestino de detención que funcionaba en el escuadrón de Comunicaciones del Ejército. Sus restos nunca aparecieron.
El proyecto de nombrar Claudio Fink a la ex calle pública N° 1825, situada a la vera del río Paraná, surgió durante la anterior gestión municipal por iniciativa de la entonces intendenta Blanca Osuna. Luego fue retomada por las actuales autoridades. Por eso durante el acto se destacó la experiencia de continuidad de esta acción de gobierno, que rescata la memoria de un detenido-desaparecido de la capital entrerriana, a la vez que conecta zonas de la ciudad históricamente relegadas y sin vinculación física a pesar de estar ubicadas a escasa distancia.
“Cada tanto la vida me da un sacudón como diciéndome: aún estás. Como estos actos que me honran, honrando a mi hijo”, continuó Clara. Ella es un ejemplo de lucha por los derechos humanos en la región, que nunca dejó de reclamar justicia. En 2013 fue declarada ciudadana ilustre.
Luego recordó que la primera vez que habló en un acto de este tipo fue el 17 de mayo de 1989 en la Universidad Tecnológica Nacional, donde su hijo y Oscar De Zorzi fueron homenajeados, como estudiantes desaparecidos. “Tenía la misma emoción que me acompaña ahora. Han pasado años y cosas. La herida es tan profunda como el primer día que lo sacaron de casa”, dijo entre lágrimas.
Antes del descubrimiento del nombre de la calle se escucharon las palabras del subsecretario de Derechos Humanos de la provincia, Matías Germano, su par municipal, Eduardo Solari, y la concejala Cristina Sosa. El homenaje logró reunir a legisladores, funcionarios y dirigentes del justicialismo y de Cambiemos, que coincidieron en el significado de este acto para la memoria de Paraná y en el compromiso de la lucha contra la impunidad.
AGMER estuvo presente en la inauguración e imposición del nombre de esta calle. Participaron de la emotiva actividad la Secretaria de Derechos Humanos, Tomasa Gómez, y Cachi Amoz, del equipo de trabajo de esa secretaría.
Fuente: Diario Uno