Durante el tramo final de la dictadura que había iniciado en 1966, jovenes militantes populares fugaron del penal de Rawson, pero no alcanzaron a huir del país como se pretendía en el plan inicial. 19 de ellos fueron cercados y trasladados a la base naval Almirante Zar de Trelew y en la noche del 22 de agosto de 1972 fueron sacados de sus celdas y fusilados.

Tres de ellos lograron sobrevivir y dieron valiente testimonio sobre lo sucedido, pudiendo romper el cerco de silencio con el que se pretendió tapar el crimen.

Este hecho representó un anticipo de lo que vendría luego, con el golpe de Estado de 1976 y su metodología de horror, mostrando cómo el poder del Estado usurpado por la fuerza se orientaba hacia el objetivo de aniquilar a los hombres y mujeres que encarnaban un proyecto político distinto al impuesto.

A 46 años, desde AGMER rendimos homenaje a los jóvenes de Trelew, y seguimos sumando nuestra voz a quienes continúan pidiendo justicia

Mario Bernasconi – Sec. de Derechos Humanos | AGMER C.D.C.

José Manuel Balcala – Sec. de Prensa | AGMER C.D.C.