El #3J es una fecha de reflexión y de manifestación colectiva en repudio a las violencias por motivos de género.
Decir Ni Una Menos no es un ruego ni un pedido. Es plantarse, es poner en palabras lo que no queremos: ni una víctima más.
Por eso cada 3 de junio nos reunimos para poblar las plazas y calles, para fundirnos en un poderoso grito. Nos encontramos en todos los pueblos y ciudades para ser la voz de quienes ya no la tienen, víctimas de la violencia femicida.
La violencia machista mata. Los discursos de odio también, como quedó demostrado con el atroz lesbicidio de Andrea, Pamela y Roxana, para quienes exigimos justicia.
Decir Ni Una Menos es tejer resistencia y solidaridad. Las políticas públicas son imprescindibles para terminar con las violencias de género estructurales. También es necesario revisar los hábitos, tradiciones y relaciones, que reproducen actos de discriminación y violencia. La transformación social es el camino para desarmar las relaciones desiguales de poder entre los géneros. En esa tarea estamos.
Construyamos una sociedad libre de violencias de género desde todos los ámbitos posibles.
Ángeles Gebhardt
Sec. de Mujer e Igualdad de Géneros | AGMER CDC