A apenas horas de concretarse la primera audiencia de conciliación referente al conflicto salarial docente, desde la Comisión Directiva Central de AGMER hacemos público nuestro profundo malestar ante la circulación –en distintos medios de la provincia- de información falaz y maniquea generada desde el Poder Ejecutivo, tendiente a crear confusión en la opinión pública sobre la situación salarial docente en Entre Ríos. El propósito es evidente: simular un imaginario que se da de frente con la dureza de los números reales, que condenan al 80 % de las y los docentes a vivir por debajo de la línea de la pobreza (hoy en 900.000 según INDEC) y que contiene una franja muy significativa. Nos referimos a docentes desde 0 a 15 años años de antigüedad, apenas superando la línea de indigencia (hoy en 405.000 – INDEC). Y en unos días, conocida la inflación de agosto, volverán a ubicarse por debajo de la misma. Además, es claro que con el inicial en $450.000 deja al mismo a mitad de camino con respecto al umbral de la pobreza.
Lo que el gobierno tampoco dice es que, con un bono en negro, se vulnera el escalafón, “achatándolo”. Asignación que, además, es abiertamente inconstitucional porque desfinancia la Obra Social y la Caja de Jubilaciones y que no lo perciben nuestras jubiladas y jubilados.
Tampoco cumplen con el compromiso de abonar la diferencia salarial devenida del proceso de recomposición de nuestros salarios y la inflación de primer semestre.
Entendemos que actitudes como estas profundizan el malestar y la angustia docente, quienes saben muy bien lo que aumentan los precios, la luz, el gas, los aportes personales a la Caja de Jubilaciones, los combustibles, etc.
La docencia se ha expresado masivamente en una histórica marcha provincial y viene sosteniendo las medidas de paro con niveles de acatamiento superiores al 90 %. Frente a semejante contundencia fue el gobierno quien solicitó a la Justicia la Conciliación Obligatoria y ésta –rápidamente- así lo dispuso.
Las y los docentes nos ajustamos a derecho, porque somos respetuosos de la legalidad. Y fueron nuestras alumnas y alumnos junto a sus familias quienes levantaron su voz, nos sostuvieron y nos resguardaron. El viernes pasado se registró un nuevo mojón que quedará en la memoria colectiva de esta provincia: el día que los padres y alumnos dieron clase. Una jornada en la que la comunidad educativa en su conjunto escribió este tramo de la historia. Así el reclamo por un salario que dignifique la tarea docente pasó a formar parte de la Defensa de la Escuela Pública. Porque podrán conciliarnos, pero jamás callarnos.
Esta Comisión Directiva Central aspira a una resolución justa y propositiva, es decir, un salario que reconozca la complejidad de la labor de los docentes entrerrianos, que de una buena vez –y por todas- dignifique nuestra tarea (venimos perdiendo poder adquisitivo, sistemáticamente, desde 2016), que nos permita hacer lo que más nos apasiona: enseñar. Y que lleve paz y tranquilidad al hogar de cada maestra/o, profesora/or.
Comisión Directiva Central | AGMER