Ana María Montenegro
Miño y Dávila Editores – 304 páginas
Un lugar llamado Escuela Pública presenta al lector una sagaz reconstrucción histórica que recupera no sólo la conformación e identidad de la escuela pública, sino la distinción que asume respecto de otros lugares de enseñanza. Al tiempo que visibiliza la actual impregnación de la lógica neoliberal en la escuela “pública” de la ciudad de Buenos Aires, Ana Montenegro ayuda a desmitificarla. Los más de trescientos años, trabajados en seis capítulos, desmenuzan cómo las pujas entre matrices espaciales, procedencias y lógicas de lugar terminan cimentando espacios disímiles: la escuela pública y la escuela particular. El camino elegido, la intrahistoria espacio-educativa, permite replantear la noción de origen bajo los supuestos de W. Benjamin y abordar al lugar desde múltiples miradas, como recomiendan Agustín Escolano Benito y Antonio Viñao Frago.
Estas páginas nos llevarán a entrar y salir infinidad de veces de los “edificios”, para encontrarnos con la “escuela”, inmersa en la calle, el barrio, la ciudad, la provincia, el país. Ingresar y emerger nuevamente infinidad de veces, como un historiador socio-cultural, un literato, un interlocutor extranjero, un demógrafo, un higienista, un arquitecto, un semiólogo, un geógrafo, un urbanista, un pedagogo para remitirnos a los “discursos” y las “imágenes” que circulan por doquier y concatenar pasado y presente, origen y paradoja desde una síntesis atrayente y abierta en debate.